En 2001, Bianca (mi hija menor) fue diagnosticada celíaca, luego Sofía (mi hija mayor) y finalmente yo también. A partir de este momento comenzó un recorrido por diferentes lugares para conseguir alimentos permitidos, ricos y que no fueran exageradamente caros, lo cual no fue muy fácil.
Buscando alternativas para la alimentación de mis hijas, me descubrí cocinando todos los días algo distinto… probando nuevas recetas y tratando de que no tengamos que privarnos de tantas cosas y que la diferencia con lo que comía el resto de la gente sea mínima. Así un día no sólo comíamos las tres las comidas (tartas, panes, tortas, pizzas, alfajores, facturas, galletitas, etc.), sino que también lo hacía toda la familia y nuestros amigos... y lo hacían con gusto!!!
Así fue cómo la cocina de mi departamento de Rosario se convirtió en mi laboratorio de comidas. Cada día una receta nueva, un producto más, una satisfacción por el logro.
Nos mudamos a la ciudad de Rafaela, de donde somos originarios y aquí me decidí. Con el apoyo de mi marido y del resto de mi familia alquilamos un lugar, lo adecuamos y con mi hermana, que es restorateur, nos pusimos los delantales y comenzamos con esta pequeña empresa, que nos acerca a lo que siempre quise: dar lo mejor de mí para aquellos que lo necesitan.
Hoy, elaboramos los productos más variados, con materia prima de la mejor calidad, aprobados, aptos para celíacos y con todo el Sentimenti puesto en dar lo mejor.
SENTIMENTI es la materialización de “mi sentimiento” de preocupación y búsqueda, es la realización de mi deseo de brindar una alimentación sana, divertida e igualitaria para mis hijas y para mi cómo enfermas celíacas. Es hacer invisible lo diferente.
Quisiera agradecerles a mis primeros clientes, que confiaron en mi sin conocerme, poniendo en mis manos de alguna forma su salud… a Valeria, Eugenio, Patricia, Belquis, Mónica, y sobre todo a Marcelo, mi marido… a mis Hijas, a mis Padres y al resto de mi familia y amigos que siempre me apoyaron en este sueño dándome tanta buena onda y ayuda. A todos ellos… GRACIAS!
Flavia Carena